Palestina

La tierra, ese elemento tan esencial y poco apreciado cuando se cuenta con él, es lo que anhelan quienes carecen de ella como el pueblo palestino. Con 138 votos a favor, 9 en contra y 41 abstenciones la Organización de las Naciones Unidas (ONU) otorgó a Palestina el reconocimiento de “estado observador” el jueves 29 de noviembre. Así, el conflicto entre Israel y los palestinos ha llegado a un nivel diferente en el ámbito internacional, aunque sin variación alguna en la violenta guerra que se ha desarrollado en forma intermitente a lo largo de varias décadas y que tomó nuevos bríos en las últimas semanas con los bombardeos en la zona de Gaza y Cisjordania.
¿Cuál es el grave e irremediable conflicto que mantiene a dos pueblos, palestinos y judíos, en esta lucha fratricida? El origen de sus problemas subyace en el exilio forzoso a que el pueblo palestino fue sometido para que el Estado de Israel pudiera ser constituido en 1948 con el aval de la única y más poderosa organización estatal a nivel internacional de ese tiempo y de la actualidad, la ONU.
Dos puntos a resaltar: El primero, que esa misma organización que forzó a los palestinos a huir del territorio que les era propio hasta principios del siglo pasado, antier les haya reconocido voz como estado observador –sin el voto con que cuentan los estados miembros- con el respaldo mayoritario de la Asamblea General, dando un viraje rotundo al estado de las relaciones internacionales, con Israel y su sempiterno aliado Estados Unidos de una parte y el resto de la comunidad internacional en la otra.
El segundo punto notable, que Israel haya aceptado con beneplácito la resolución de la ONU que permitió la creación del estado judío en 1948, mientras en la actualidad le resta autoridad a esa organización internacional con las declaraciones del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu quien dijo que, contrario a lo que creen los palestinos, su inclusión entre los estados observadores junto con El Vaticano, no va a ayudar a la creación del estado palestino sino que los aleja irremediablemente de su meta. Israel está desestimando el poder que mantiene la ONU a nivel internacional porque va en contra de sus intereses.
Para los palestinos este respaldo significa la esperanza de una probable aprobación para la creación de un ente estatal que les brinde un territorio propio donde su nación pueda asentarse sin temor a ser agredidos. Su legitimación dentro de la ONU como estado observador no está en contra del estado israelí sino a favor de la constitución de un país con el nombre de Palestina en el corto o mediano plazo. En este momento, las piezas del ajedrez internacional son favorables para los palestinos, después de décadas en que sus enemigos han tratado de acallar sus demandas, alejarlos de sus fronteras y, en muchas ocasiones, de exterminarlos.
Publicado en Verticediario.com y su respectiva edición impresa el 01 de diciembre de 2012.

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